DRONES: ¿ENTRETENIMIENTO DEL FUTURO O MODA PASAJERA?

«¡Volando voy, volando vengo, vengo! ¡Volando voy, volando vengo, vengo! ¡y por el camiiinooo yo me entretengo!» dudo que Camarón estuviera pensando en los drones cuando entonó su más célebre y rumbera canción…

Pero, a juzgar por la letra bien parece que estuviera pensando en ellos ¿no crees? En fin, dejaré de cantar por el bien de la humanidad y me centraré en el tema que nos ocupa esta semana… drones.

Todo el mundo hemos oído hablar de ellos y últimamente parece que quien más y quien menos tiene algún amiguete o familiar que ha adquirido uno de estos artefactos.

Pero ¿qué sabemos realmente acerca de ellos? pues, la mayoría de las veces, poco o nada. Por eso, esta semana en ProdeX, intentaremos acercarte un poco a este mundo desconocido de artilugios voladores.

Los drones o, como sus siglas en inglés nos indican, los UAV (Unmanned Aeríal Vehicles) son, sencillamente, máquinas voladoras no tripuladas que se manejan por control remoto.

Como tantos otros buenos inventos de la humanidad estos versátiles aparatos nacieron para exclusivo uso militar.

Creados en un principio para realizar misiones bélicas, tales como ser un blanco móvil en pruebas de tiro o investigar en terreno enemigo, con el tiempo, y gracias al avance de la nanotecnología y el abaratamiento de los costes, se han ido introduciendo poco a poco en el terreno de lo civil.

Cada día que pasa es más fácil y económico construir piezas pequeñas y minúsculos procesadores de toda índole que encajen en estos dispositivos, en consecuencia, esto hace que cada vez se creen Drones más inteligentes y capaces de realizar las más variopintas tareas.

Actualmente estos objetos volantes se están usando para realizar tareas antes llevadas a cabo por helicópteros y sus pilotos, minimizando el consiguiente gasto y riesgo de vidas humanas que eso conllevaba.

Así, nos podemos encontrar estos artilugios sobrevolando terrenos y realizando fotografías en el ámbito de la cartografía aérea o vigilando los parques forestales en busca de señales de incendio, y ya, en ocasiones más extremas, se utilizan drones para hacer tareas peligrosas como sería, por ejemplo, la retirada de residuos peligrosos o, en definitiva, cualquier actividad que ponga en riesgo vidas humanas.

Hay tantas áreas en las que se puede aplicar esta tecnología que nos pasaríamos aquí todo el día y no acabaríamos de enumerarlas todas.

Pero piensa por un momento en la infinidad de aplicaciones: cuerpos de seguridad, cartografía, agricultura, construcción, logística…

Y como toda nueva tecnología un día u otro llega al gran público, es por eso que comentábamos antes lo de que seguro todos tenemos algún conocido que se ha comprado un dron últimamente… Nosotros sí, tú también ¿no?.

Pues, si eres de los que te gustaría tener un dron, hay ciertas cosas que deberías saber antes de adquirir uno. Por ejemplo, que según la legislación vigente al respecto, aprobada tan sólo desde hace poco más de un año, sólo está permitido el uso de drones a particulares dentro de recintos cerrados y, que si se pretende hacerlos volar al aire libre, se necesita tener una licencia de piloto, sí, sí, has leído bien, de piloto, o haber realizado un curso aprobado por la AESA.

Y, si ya lo que quieres es sobrevolar un núcleo urbano, entonces la cosa se complica pues, además de lo anteriormente mencionado, necesitarás solicitar también un permiso especial en la subdelegación del gobierno.

Sabemos bien que estas medidas pueden parecer a priori un poco exageradas o paranoicas pero tenemos que pensar que cuando una nueva tecnología, con un potencial tan peligroso como esta, llega al gran público, los gobiernos se ven en la obligación de tomar las medidas de seguridad pertinentes para prevenir que «gente descerebrada» haga un uso indebido de tales prodigios tecnológicos.

Viendo lo que pasó en París recientemente entendemos que estas medidas de control sean tan estrictas.

Aunque actualmente en España, si se usa un poco de ese «sentido común» tan olvidado a veces y no se realizan trastadas, todavía es perfectamente posible adquirir un dron y hacerlo volar «de estrangis» sin meterse en demasiados problemas.

Además encontramos en el mercado modelos de drones y minidrones ciertamente muy asequibles a todos los bolsillos, con precios que oscilan entre poco más de 100€, los modelos más económicos, hasta casi rozar los 700€ en las versiones más profesionales.

Para concluir con el articulo de hoy, diremos que en ProdeX nos gusta pensar que los drones han venido para quedarse y para traernos cosas maravillosas en ese futuro tecnológico que siempre soñamos.

Por nuestra parte intentaremos poner nuestro granito de arena para hacer de las nuevas tecnologías una ayuda para construir un futuro mejor para todos nosotros y para las generaciones venideras.

Empezando por mantenerte informado semana tras semana ;-).

Y tú, ¿qué harás por mejorar el futuro?.